La charla puso de manifiesto la importancia de la atención a la dependencia más especializada, frente a otros recursos informales y el permanente control que la asistencia institucional realiza sobre sus procedimientos de trabajo. Se transmitió a los asistentes la preocupación de los medios asistenciales profesionales por prestar una atención de calidad, centrada en la persona y en la que los valores fundamentales de nuestros mayores son el eje primordial de trabajo de nuestro personal especializado.
Se incidió en describir los distintos tipos de maltrato que pueden producirse y en analizar las causas más frecuentes que lo motivan en dependencia del medio en que se producen. Los medios institucionales, como es nuestro caso; poseen procedimientos de detección, control y actuación en el caso de detectar un maltrato evidente, o una sospecha. También se dieron indicaciones respecto a su prevención.
Se incorporaron orientaciones realizadas por el Consejo Europeo, relativas aÂÂ aspectos que preocupan a nuestros mayores y sobre datos recopilados en nuestro país, que incluyen concretamente contenidos sobre malos tratos y la situación de soledad en la que viven muchos mayores de 65 años en España.
Una parte importante de la intervención versó sobre medios y procedimientos de contención, que se analizaron desde una perspectiva que defiende la integridad, dignidad y desarrollo personal del dependiente. Se plantearon los pros y los contras del uso de los mismos; y las condiciones indispensables que deben darse para su prescripción, mantenimiento y revisión.
Se cumplieron por tanto dos objetivos prioritarios del grupo, como son la formación interna de nuestro personal y la apertura del centro al entorno profesional que nos rodea, y del que nos consideramos una parte importante más. En definitiva abrimos el centro hacia el exterior para mejorar y posibilitar el objetivo marcado por nuestro Grupo, que no es otro que considerar la residencia como un centro vivo y dinámico.